4.12.25
2.12.25
SECCIÓN TRANSVERSAL DE LOS ALPES DINÁRICOS
26.11.25
SEPULTURA DE GYORGY LIGETI
24.11.25
22.11.25
19.11.25
18.11.25
EL RÍO Y LA CIUDAD (II)
16.11.25
EL RÍO Y LA CIUDAD (I)
La ciudad de Viena mantiene una extraña relación con el río Danubio. Sucede en muchas ciudades que, primero el puerto y después el ferrocarril, terminaron por separar la orilla del mar, o del curso fluvial, de la población a la que sirven. Pienso, al decir esto, en Barcelona y en el enorme esfuerzo que realizó de soterramiento de vias ferreas y rodadas para conseguir que la ciudad llegara al mar, al menos en un tramo significativo.
El transporte ferroviario en Viena continúa temiendo una especial importancia estratégica debido a que se encuentra en el estrechamiento entre los Alpes y los Cárpatos por el que el río Danubio entra en la llanura panónica. Y es que Viena tiene su primera razón de ser como guardiana de la vía comercial que se estableció entre las llanuras del norte (atlántica y báltica), y la llanura panónica.
En el caso de Austria, país sin acceso al mar, y el de otros territorios con la misma carencia, el transporte de mercancías por el Danubio tiene gran importancia. Todo en el Danubio y algunos de sus afluentes está supeditado a esta necesidad económica, que es nacional e internacional. Pero, ¿en qué se materializa esa necesidad? Pues, principalmente, en el acondicionamiento del río por medio de esclusas y taludes que mantienen un cauce estable y una profundidad suficiente. Las esclusas cumplen también otra importante función, que es la de proporcionar energía eléctrica, de manera que toda esclusa es también una central hidroeléctrica. Estas dos funciones obligan a la creación de aliviaderos de crecida (que a veces es un brazo paralelo), que garantizan su correcto funcionamiento.
Y así, es en ese orden de cosas como debe entenderse el río Danubio a su paso por Viena. Es decir, que el desdoblamiento del cauce del Danubio y la aparición de la correspondiente isla entre ambos no es un invento vienés, sino un invento internacional de regulación del río que la ciudad aprovecha de la mejor manera que puede.
Viena no ha podido eliminar ni soterrar la línea férrea que la separa del Danubio, de manera que la aproximación de la ciudad al río no ha podido realizarse en la orilla inmediata a la ciudad, sino en la orilla correspondiente al aliviadero de crecida, así como también en la isla que separa este del cauce principal.
La fotografía muestra los dos brazos principales en los que está actualmente dividido el río (orginalmente contaba con muchos más): el suroeste, a la izquierda, de color grisáceo, que corresponde al río propiamente dicho, por el que circula el agua y que soporta el tráfico fluvial; y el noreste, a la derecha, de color azul, que corresponde al aliviadero de crecida, que de ordinario no transporta agua. Y enmedio de los dos brazos, se encuentra la estrecha franja de tierra que los separa.
Fotografía encontrada aquí.
13.11.25
12.11.25
9.11.25
4.11.25
29.10.25
LAS DOS PUERTAS DE LA CUENCA PANÓNICA
Mis avances en la comprensión de la geografía de Europa del este son como el tranquilo avance de un caracol. Y hoy me ha sucedido resolver una duda que me surgió hace tiempo. Y es que, igual que aquel hombre inmortal, protagonista del cuento de Jorge Luis Borges Acevedo, dedujo que si existe un río que proporciona la inmortalidad ha de existir otro que devuelva la mortalidad, yo también llegué a la conclusión de que, si existen unas Puertas de Hierro que salvaguardan la cuenca panónica en su desagüe, también han de existir otras "puertas" de igual importancia estratégica, en la embocadura del río Danubio a la cuenca panónica ¡Pero yo, erróneamente. las buscaba en los límites del reino de Hungría, que yo me empeñé que comprendía toda esa cuenca!
La clave la proporciona la geografía y se deduce fácilmente de su observación: la entrada a la cuenca es el espacio relativamente constreñido que se encuentra entre los Alpes del este y los Cárpatos del oeste. Y su importancia estratégica es proporcional a la importancia del asentamiento que se creó en ese lugar, que llegó a ser la capital de un reino y de un imperio: Viena.
26.10.25
SINFONÍA NÚMERO 5 DE GUSTAV MAHLER
25.10.25
YO VOY SOÑANDO CAMINOS, DE ANTONIO MACHADO RUIZ
YO VOY SOÑANDO CAMINOS
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero...
—La tarde cayendo está—,
«En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón.»
Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.
La tarde más se obscurece;
y el camino que serpea
y débilmente blanquea,
se enturbia y desaparece.
Mi cantar vuelve a plañir:
«Aguda espina dorada,
quién te pudiera sentir
en el corazón clavada.»
Antonio Machado Ruiz
24.10.25
RIO OJA, RIO VIENA
De la misma manera que el Ebro es el río principal pero el río Oja es el que hace singular el territorio (La Rioja), así también el río Danubio es el río principal, siendo el río Viena es el que singulariza el territorio, dándole su nombre.
El río Viena, crecido, bajo las Wientalterrassen, en el distrito de Margareten. Fotografía encontrada aquí.
23.10.25
TREBLINKA
Me decía una amiga americana, residente en Alemania, que ella venía "de donde asustan", refiriéndose a la delincuencia cotidiana de las mafias que azota su sociedad, en comparación con la tranquilidad actual en su país de acogida. En ese momento asentí, considerando las imágenes que ella me proponía, y olvidé el comentario. Pero después me di cuenta de lo que habíamos pasado por alto, y de la necesidad de recordarlo.





















































